Magistratura municipal romana. Los ediles eran los oficiales encargados de la supervisión y mantenimiento de los edificios públicos, los templos religiosos y los mercados. También organizaban los festivales de juegos y espectáculos, lo que les hacía ganar mucha popularidad. Eran elegidos en comicios públicos en los que podían votar todos aquellos que tuvieran los derechos de ciudadanía romana.