¿Tomamos un café? es una sugerencia que decimos a menudo cuando queremos conversar con alguien sobre algo. Detrás de la invitación hay un mundo de sobreentendidos que todo el mundo conoce: parar por un momento aquello que estamos haciendo, compartir noticias, intercambiar pareceres, tomar decisiones, discrepar... Detrás del café está la cultura del diálogo, que adentra sus raíces en los mismos orígenes que la Europa Moderna. “Dibujar un mapa de los cafés y tendréis uno de los indicadores esenciales de la idea de Europa”, dice Georges Steiner. Si alguna vez ha habido una idea de Europa, una cultura o unos valores europeos, estos sin duda se han forjado en los Cafés. La vida de Café ha modificado la noción de espacio público, ha sido decisiva en la configuración de la prensa periódica y ha sido una catalizadora de la escritura y del arte. En definitiva, todo un universo de palabras habita, como un sedimento ancestral, en el poso de cada café.

¿Tomamos un café? es el título de la próxima exposición temporal del Museo de Historia de Valencia, que quiere reflexionar sobre la importancia que el café y los establecimientos donde se  consume han tenido y tienen en la conformación de nuestra cultura, en la configuración del paisaje urbano del último siglo y medio e, incluso, en la construcción de la geografía sentimental de cada cual.

Os iremos informando de la exposición, de la fecha de inauguración y de las actividades relacionadas, pero de momento iniciamos aquí un recorrido por la historia y la actualidad del café, que se plasma en una serie de anécdotas, mensajes publicitarios y datos estadísticos sobre la que constituye una de las principales mercancías del comercio mundial.