Fernando Romeu Peris, padre de Sol, haciendo el servicio militar en una guardia con sus compañeros.

Fernando estuvo en la guerra en el frente de Teruel, donde fue herido inmediatamente después de llegar. Sol recuerda haberlo visto en el hospital miilitar de Paterna, escena que quedó asociada para ella  con el olor de la comida y  la melodía de un tango que sonaba.