Acto jurídico por el cual los bienes de manos muertas, inalienables por prescripción legal, regresan a la condición de libres. Entre 1798 y 1807 se llevó a cabo la primera desamortización de bienes de la Iglesia, que había acumulado y retenido durante siglos. En la ciudad de Valencia la desamortización afectó a 275 fincas de la Iglesia, que poseía el 20% del patrimonio inmobiliario de la ciudad. A lo largo del siglo XIX se realizaron sucesivas desamortizaciones eclesiásticas y nobiliarias hasta poner todas las propiedades en el mercado libre.