Soy Berenguer Tovià, artesano bruneter de la ciudad de Valencia.
Nací en Valencia hace 37 años, el año de la Encarnación del Señor 1279. Según contaba mi padre, el abuelo Berenguer, del que apenas recuerdo nada, fue el primero de la familia que vino aquí, acabada de tomar la ciudad a los moros por el rey Jaime I el Conquistador. Era pelaire en su pueblo natal, allá en Cataluña, y compró el obrador que ahora poseo en la pobla del Bisbe a un soldado navarro. Me hice cargo de él poco después de casarme con Guillema a los 23 años. Soy bruneter y mi oficio consiste en confeccionar y vender buenos paños de lana de Morella. Mi mujer y mis dos hijas cardan e hilan la lana, después la llevo al tejedor y una vez tejidos llevo los paños a los tundidores para que eliminen la suciedad y la grasa. Yo mismo los cardo y estiro para darles apresto y, finalmente, mi tintorero de confianza les da color y los deja listos para despachar. Vendo una parte a los mercaderes pañeros pero también utilizo el obrador como tienda y no me puedo quejar: la gente compra mucho porque nuestros paños son cada día de mejor calidad y no tienen nada que envidiar a los de Francia o Flandes. En el taller, aparte de mi familia, me ayuda un mozo que tengo como aprendiz. Espero que mi pequeño Pasqualet, que acaba de cumplir 2 años, pueda heredar un buen negocio.